Este mes para nuestra edición especial de Salud Mental entregamos nuestra columna Media Naranja—que se enfoca en el amor, en todas sus formas—a una iniciativa que tiene años de crear una comunidad apasionada por romper estigmas de salud mental en Costa Rica. La iniciativa es Vaso Lleno; su fundadora, Cris Gomar. En sus redes sociales comparte regularmente mensajes de amor y apoyo para personas que enfrentan diversos retos de salud mental.
Para la columna de hoy, compartimos un mensaje de Cris basado en un post de Vaso Lleno sobre la depresión. Lea el post original aquí.
Lo primero que te quiero decir es que lo siento. De verdad siento muchísimo que pasés por una experiencia tan oscura, difícil y retadora. Yo he estado ahí y sé lo difícil que es ver la luz al final de túnel. Incluso lo imposible que parece saber que efectivamente hay una luz. He estado ahí donde no hay fuerzas ni para levantarse de la cama, lavarse los dientes o bañarse. Donde la cama tiene una energía de otro mundo que jala como un imán nuestro a cuerpo y parece que no hay otra fuerza que la contrarrestre. He vivido esa sensación donde nada parece tener sentido, nada se disfruta, se vive en piloto automático y no encontramos motivación para hacer nada, ni siquiera lo que antes nos producían felicidad. He estado ahí y trato siempre de recordar que podría caer de nuevo en algún momento. Así que, ¡lo siento muchísimo!
Lo segundo es que te ruego que pidás ayuda. La depresión es la ruta favorita para una ideación o un intento suicida y la buena noticia es que pedir ayuda significa poner obstáculos para detener ese camino. No tiene absolutamente nada de malo o de débil decirle a alguien que no lo estás logrando. Es una señal de valentía impresionante. Y sí, yo sé que durante una depresión hasta pedir ayuda es un acto dificilísimo de hacer pero buscá la forma. Un mensaje de texto a una amiga, un ataque de llanto con un familiar, un meme al primo. Lo que sea, ¡pero hacé algo! Las depresiones son momentos muy duros donde esa fuerza poderosa recubre cualquier pensamiento positivo pero te aseguro que podes salir de ahí. Yo lo he vivido y he salido de varias así que vos podes también. ¡Pero pedí ayuda! Nadie debería vivir este proceso en soledad.
Lo último es que celebrés cualquier pequeña victoria, por más pequeña que parezca. ¡Cualquier paso en medio de una depresión es una victoria enorme! Si lograste lavarte los dientes, bañarte, estar en una clase, enviar ese reporte o comer. ¡Celebralo! Es una victoria y debe ser vivida como tal.